¿Qué es ecoturismo y cómo funciona el ecoturismo?
En pocas palabras, el ecoturismo hace referencia a una forma de viaje sostenible que apoya el medio ambiente local en lugar de explotar sus recursos y ejercer más presión sobre él.
Se trata de una forma de marcar una gran diferencia y es algo que esperamos que cada vez más y más gente empiece a practicar.
El ecoturismo puede definirse por una variedad de prácticas de turismo. Como ecoturista, decides viajar de una manera que respete la naturaleza y no contribuya a su degradación.
Además, el ecoturismo participa en la conservación del medio ambiente y en la comprensión de las necesidades de la población local, para poder ayudar a mejorar su calidad de vida. También implica aprender más sobre la historia de otras ciudades y preservar los lugares de interés histórico.
Los problemas del ecoturismo empiezan desde la definición, ya que las personas que trabajan en diferentes campos (académico, turístico, político) tienden a preferir enfoques algo diferentes.
Hay algunas definiciones que lo destacan. La más aceptada es la de la Unión Internacional para la Conversación de la Naturaleza (UICN):
“Viajes ecológicamente responsables en zonas naturales, con el fin de disfrutar y apreciar la naturaleza (así como los rasgos culturales que la acompañan, tanto pasados como presentes) que promueven la conservación, tienen un bajo impacto a causa de los visitantes y proporcionan una participación socioeconómica beneficiosa y activa de las poblaciones locales.”
Otra definición más directa es la que da la Sociedad Internacional de Ecoturismo (TIES), que dice que el ecoturismo “es un viaje responsable a zonas naturales que conserva el medio ambiente y mejora el bienestar de la población local.” En la práctica, esto implica varias cosas.
Esto implica un nivel de conciencia por parte del turista: debe ser consciente de su impacto tanto en el medio ambiente local, así como en la comunidad local y debe tratar, dentro de los límites razonables, de reducir este impacto. Del mismo modo, el turista no sólo debe tratar de hacer el menor daño posible, sino también de apoyar a la comunidad local siempre que sea posible. Hay que destacar que esto no significa necesariamente que la experiencia sea menos agradable, al contrario. Esta actitud de comprensión a menudo lleva al viajero a disfrutar aún más de su experiencia.
También es importante no dejarse engañar por ofertas y palabras agradables – unas vacaciones no son “ecoturismo” sólo porque lo diga en el anuncio, y muchas compañías anunciarán las vacaciones como ecológicas sin una justificación real. El ecoturismo es uno de los sectores de la industria turística de más rápido crecimiento, y los operadores turísticos suelen tratar de atraer a los clientes mediante la eco-publicidad.
Sin embargo, cuando se practica adecuadamente, el ecoturismo puede marcar la diferencia y ayudar.
También se trata del tamaño de los grupos que viajan. No es posible practicar ecoturismo en masa, es un oxímoron – el ecoturismo debe practicarse en grupos pequeños o medianos. Suele haber un fuerte componente educativo asociado al ecoturismo, que también ayuda, pero no es obligatorio. Los temas comunes en este contexto son el consumo responsable de agua, reciclar, la artesanía local, y practicar el ciclismo o el senderismo en lugar de tours en quads (por ejemplo). Se hace un gran hincapié en la protección de especies locales, especialmente las especies amenazadas.
Por qué necesitamos el ecoturismo
Según los datos publicados por la OMT (Organización Mundial del Turismo), se registraron en 2019 más de 1.400 millones de llegadas de turistas internacionales (alrededor de una quinta parte de la población mundial). Todas estas personas no sólo emitieron enormes cantidades de CO2 (indirectamente) sino que también ejercieron una gran presión en muchos entornos.
No hay forma de evitarlo: a medida que el nivel de vida aumenta en todo el mundo, el turismo está creciendo (salvo por la pandemia del COVID-19), y el turismo supone una carga sustancial para los ecosistemas.
Los turistas también requieren de infraestructura adicional, como plantas de tratamientos de agua, instalaciones sanitarias y alojamiento. Es muy común encontrarte con que las comunidades locales no son capaces de ofrecer estas condiciones de forma sostenible y los resultados pueden ser devastadores. En muchas partes de África, por ejemplo, el turismo a gran escala a dado lugar a la eliminación inadecuada de las aguas residuales. Esto, a su vez, dio lugar a la contaminación de ríos cercanos donde la vida silvestre, el ganado y las personas obtienen agua potable, pero eso solo es el comienzo.
Especialmente en las zonas vulnerables, el aumento de visitantes puede conducir a una importante degradación del medio ambiente. Las comunidades locales también pueden verse perjudicadas por la afluencia de turistas, ya que la afluencia de dinero que se genera con el turismo rara vez se dirige a ellos. Vaya a dónde vaya la gente mientras viaja, deja basura atrás, e incluso dejándola en contenedores, todavía puede crear un peligroso desequilibrio. Los safaris y las fotografías de animales suelen asustar a los propios animales. Alimentar a la fauna salvaje puede crear malos hábitos y dependencia al ser humano. Incluso el simple hecho de caminar por una zona determinada puede llevar a la erosión del suelo y a la destrucción de los caminos utilizados por los animales. Puede ser difícil de aceptar, pero todo lo que hacemos tiene un impacto en la fauna y flora que nos rodea, debemos ser conscientes de ello.
Los ejemplos abundan, cómo es el caso de la Antártida (una de las zonas más vulnerables del planeta), dónde cualquier basura generada por el ser humano puede tardar cientos de años hasta descomponerse (y los turistas dejamos mucha basura por mucho que no nos guste leerlo). En Australia, los turistas son causa directa de la destrucción de la Gran Barrera de Coral, y en África, los empleos del sector turística están muy mal pagados, sin embargo, el turismo hacer subir los precios, y recuerda que ese dinero no suele ir a los locales (pero los precios siguen subiendo). Marcar la diferencia puede ser muy fácil, y renunciar al turismo en masa es un primer paso muy necesario.
Siguiendo esta línea, se puede afirmar que el ecoturismo tiene potencial de sobra para marcar una diferencia dramática, eliminando el impacto ambiental, o al menos, reduciéndolo.
El mundo necesita absolutamente más el ecoturismo. Enseña a los viajeros a estar más en sintonía con las zonas más vírgenes del mundo, ayuda a educar a la gente, proporciona fondos para la conservación, así como para las comunidades locales (a menudo indígenas). Además, al despertar un estado de respeto y conciencia en el turista, la calidad de sus viajes también aumenta considerablemente.
¿Cuál es el objetivo principal del ecoturismo?
Es probable que te encuentres a personas que afirman que “ecoturismo” y “turismo sostenible” son un oxímoron – que no se puede viajar de una manera que ayude al medio ambiente. En primer lugar, tienes que ir de un lugar a otro, lo que casi siempre implica coger un avión, que quema combustibles fósiles. En segundo lugar, no importa cuánto lo intentes, tu impacto siempre será negativo. Si has decidido viajar, todavía puedes hacer mucho por reducir tu impacto y al menos en algunos aspectos, incluso tener una diferencia positiva. Siempre hay espacio para mejorar.
El ecoturismo es valioso para la población, la estabilidad económica y el planeta
Como ecoturista, viajas con algo más que la satisfacción personal en mente. Ayudas al planeta y permites a la gente llevar una vida más satisfactoria.
Vivimos en un mundo muy diverso, lleno de gente ecléctica que vive de la tierra y depende de lo que la naturaleza puede proveerles. Ciertas atracciones turísticas (naturales y creadas por el hombre) pueden estar ubicadas en un área específica, pero eso no significa necesariamente que vaya a devolverle algo a las comunidades de la zona.
Las comunidades locales, especialmente aquellas que no cuentan con medios industriales para prosperar, podrían beneficiarse en gran medida de los turistas que respeten sus tierras, a la vez que proporcionan financiación adicional.
En cambio, las grandes corporaciones tienden a cambiar la forma de vida de muchos nativos en función de lo que será más rentable para ellos. Cuando esto sucede, los locales a menudo se reubican y quedan devastados tanto a nivel físico como emocional debido a las tensiones que se generan con estos traslados.
Muchas poblaciones indígenas han sido engañadas a lo largo de la historia, o destruidas por completo, para establecerse el turismo, pero eso no tiene porqué ser así.
Mientras cumplas con los siguientes propósitos, nos atreveríamos a decir que el ecoturismo tiene éxito al:
- Construir una conciencia ambiental y cultural. El primer paso para hacer algo es entender lo que se debería de hacer.
- Minimizar el impacto. Si debes hacerlo, viaja en avión. Si puedes evitarlo, prueba a viajar en tren. Camina o ve en bici en lugar de conducir, o al menos, usa el transporte público. Respeta los recursos locales y no desperdicies.
- Proporcionar experiencias positivas tanto a los viajeros como a los anfitriones. La primera es un hecho, pero la segunda a menudo se descuida. Respeta a los locales, su comunidad y apóyalos a ellos y a sus valores.
- Proporcionar beneficios financieros directos para la conservación. Si realmente es ecoturismo, gran parte del dinero que pagas irá destinado a la conservación.
- Proporcionar beneficios financieros y el empoderamiento de la población local. Compra productos locales, auténticos (generalmente de mejor calidad y apoyan al productor local). De esta manera, obtienen muchos más beneficios financieros que del turismo masivo – incluso si el número de turistas es menor.
- Sensibilizar sobre el clima político, ambiental y social de los países anfitriones. Este es el objetivo más delicado y difícil de lograr. Nunca es fácil de hacer, y a veces puede ser incluso difícil de entender del todo.
El ecoturismo y su mala práctica
El ecoturismo es uno de los sectores del turismo de más rápido crecimiento, con un incremento anual alrededor del 10-15% en todo el mundo. Desafortunadamente, esto a tenido consecuencias negativas, especialmente debido a opciones disponibles en el mercado disfrazadas de ecoturismo que en realidad son perjudiciales para el medio ambiente.
Algunas personas confunden cualquier forma de viaje en la naturaleza como ecoturismo. Sólo porque estés en la naturaleza no significa que estás haciendo las cosas bien, al contrario, a menudo significa que tu impacto es alto y negativo. Los viajes a través de la selva o viajes de aventura no son ecológicos y no deben confundirse como tales, aunque encuentres muchos operadores turísticos usando palabras de moda como “verde” o “eco friendly”.
Así que, si algo se hace llamar ecológico, ¿cómo podemos saber cuando lo es y cuando no lo es? Pues es bastante sencillo: piensa en el objetivo primario del ecoturismo y usa tu conciencia. Si tu viaje implica caminar a través de la selva, ¿esa caminata ayudará a la naturaleza y a la población local de alguna manera? Si te afirman que el dinero irá destinado a la conservación de la zona, ¿cuánto de tu dinero se va a destinar realmente para ese propósito? ¿El 1%? ¿El 10%? ¿70% quizás? Hazte preguntas como estas antes de definir si una actividad es eco friendly o no. Presta especial atención a los zoos o a los llamados santuarios.
Ganamos conciencia gracias al ecoturismo
Lamentablemente, muchas de las experiencias de viaje que existen en la actualidad no tienen en cuenta cómo afectan a nuestro planeta ni tampoco el bienestar de las personas. Existen muchos reclamos turísticos populares que son totalmente insensibles al medio ambiente y a la fauna salvaje.
Estos lugares continúan ganando una gran cantidad de dinero porque muchas personas no son realmente conscientes del daño y el dolor que generan, y se quedan sólo en su visión personal de “divertirse”. (Sí, pero ¿a qué precio?)
Por otro lado, las atracciones menos conocidas pueden ser capaces de albergar y recibir a un gran número de visitantes a la vez, pero necesitan algo de publicidad y financiación para crecer. Cuando visitamos un lugar estupendo y respetuoso con el medio ambiente y contamos la experiencia, estamos ayudando a promover negocios ecológicos y a mantenerlos en funcionamiento.
Los animales sufren cuando viajamos de forma no sostenible
Muchas pequeñas empresas alrededor del mundo trabajan sin descanso para salvar a los animales de su extinción y el apoyo financiero les ayuda en esta misión. En muchas de las principales atracciones turísticas, los animales son injustamente enjaulados o forzados a participar en espectáculos que les causan estrés e incomodidad (a causa del maltrato y abuso constante que reciben, muchos mueren).
En lugar de pagar para ver a los animales en cautiverio, haz turismo para ir a verlos en su hábitat natural. Existen rutas de excursión esperando a ser exploradas que ofrecen vistas increíbles de la naturaleza y encuentros cercanos con diversas especies.
Preguntas frecuentes sobre el ecoturismo
¿Cómo promover el ecoturismo?
Si quieres convertirte en un ecoturista, tienes algunas formas de probarlo y promoverlo:
- Incluye alternativas de ecoturismo en tu próximo viaje.
- Ve a hoteles y alojamientos ecológicos.
- Reduce tu huella de carbono (si puedes evitarlo, prueba a viajar en tren. En vez de tours en coches, usa medios más sostenibles como la bici o simplemente tus pies).
- Di NO al comercio ilegal.
- Viajar a islas: Apoya las opciones sostenibles en estos destinos.
- Cuida de los lugares de patrimonio.
- Sal de tu zona de confort al viajar.
- Apoya el turismo y las iniciativas comunitarias.
- Respeta las prácticas de la población local.
- Evita usar al máximo que puedas el plástico. Utiliza bolsas reutilizables.
- Viaja en temporada baja.
- Aléjate del centro de las ciudades.
- Busca planes y alternativas de ocio por la zona que sean eco friendly.
¿Cuáles son las principales características del ecoturismo?
Resumiendo, el ecoturismo se preocupa de tres cosas principalmente:
- El bienestar del medio ambiente local.
- El bienestar de la población local.
- Proporcionar una experiencia de calidad al turista.
¿Cuáles son los tipos de ecoturismo?
El ecoturismo es un término amplio que abarca muchos tipos de viajes que comparten los objetivos de la conciencia y el respeto culturales y ambientales, el impacto mínimo en el medio ambiente y la preservación y mejora de las poblaciones locales en todo el mundo.
- Alojamientos ecológicos o Ecoalojamientos o alojamientos ecológicos: Este tipo de alojamientos implican haber sido construidos con conciencia ambiental. Pueden ser desde hostales y hoteles construidos con materiales sostenibles o en entornos naturales, hasta “eco-resorts”, que se construyen en sitios remotos y ofrecen actividades de ecoturismo como observación de aves, senderismo o kayak.
- Agroturismo: Se trata de visitar o hacer voluntariado en comunidades agrícolas rurales. Los ecoturistas tienen la posibilidad de trabajar con las comunidades para proporcionar ayuda sostenible o para aprender sobre los métodos de agricultura sostenible de esa región específica.
- Desarrollo de la comunidad: algunos voluntariados están más centrados en compensar los efectos negativos del turismo masivo y la modernización. Los ecoturistas realizan labores como plantar árboles, construir casas o aprender oficios locales. También se realizan voluntariados en escuelas, museos o centros de investigación para fomentar la conciencia cultural.
- Excursiones ecológicas (eco tours): todo tipo de actividades deportivas que sean respetuosas con el medio ambiente. Desde senderismo, rafting, escalada, espeleología, natación, navegación (mejor con barcos de vela) u observación de aves.
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